Hace unas semanas se supo sobre la celebración de los 25 años del lanzamiento del emblemático disco de Pearl Jam, «Ten», el cual es considerado un clásico de los 90s con himnos como «Alive», «Even Flow» y «Jeremy». Muchos saben ese dato con gusto, pero en esa misma fecha pero de 1996, el grupo lanzaba el álbum «No Code«, considerada la pieza musical rara y experimental del quinteto de Seattle. Muchos son los factores detrás de esta creación, que hacen que este sea el inicio de una nueva etapa, y en esto en un tiempo que la postura rebelde de la banda iba en contra de todo ente comercial hacía su imagen y lo que se hacía llamar «Grunge«.

1) El año mortal del grunge, y la permanencia

1996 es un año que muchos consideran funerario para la popular escena musical de Seattle. Soundgarden anunciaba su separación, Alice In Chains tocaba por última vez en vivo para MTV Unplugged, y todo post muerte del frontman de Nirvana, Kurt Cobain. Todo esto junto señalaba la tumba de un género que los medios explotaron como querrían, pero en el intento, solo Pearl Jam siguió en el camino. Se destaca que ese mismo año lanzaron «No Code«, constando con 3 disco previos («Ten», «VS.» y «Vitalogy») considerados clásicos, pero siendo esta ocasión el momento de experimentar con nuevos aires lejanos a su sonido de inicios de la década.

2) Ticketmaster y los Grammys

La enemistad de Pearl Jam con la alza de precios causada por Ticketmaster, fue uno de los juicios más polémicos en sus días, siendo el grupo los ganadores de este excesivo monto que la boletería le otorgaba a sus conciertos. Este es uno de los hechos que directamente (habiendo así o no) hizo el switch para que la postura da la banda estuviera en contra de todo lo impuesto por lo comercial. Uno de los ejemplos claros de su desinterés en esto fue su discurso en la celebración de los Grammys en 1996

https://www.youtube.com/watch?v=AHEYs0CMe4U

3) Profundidad, melancolía y disconformidad

«No Code» al ser lanzado, desconcertó a la mayoría de los fanáticos, siendo que esperaban un sonido parecido o mejor a lo que había sido mostrado en «Ten», VS.» y «Vitalogy, que si bien estaban encasillados dentro del grunge, uno era diferente hacía al otro. Acá la furia que Eddie Vedder desataba con sus gritos y raspado, la transmitía de manera melancólica y tranquila. La reflexión fue el ingrediente «raro», y aquí se iba a saber una cuestión en especifica. Si los fanáticos fieles iban a abandonar su afán, o iban a apoyar la propuesta musical. Hasta el día de hoy se sabe de lo potente que es su base de seguidores alrededor del mundo.

Una joya musical, que el día de hoy tiene mucho más reconocimiento dentro de la discografía de Pearl Jam, y que ha sabido envejecer, para ser utilizado como el ejemplo claro de transición y evolución musical. Al principio siempre cuesta digerirlo, pero con tiempo y paciencia, este puede llegar a convertirse en un amado hijo perdido. En esa pieza única que solamente sabes apreciar cuando sea el momento indicado.