Lo vivido el 31 de agosto en el Domo San Diego, fue una velada cargada de euforia y emociones. El debut histórico de los veteranos del emo rock estuvo acompañado de un bando fiel de seguidores que demostraron las ansias con las que se esperaba la presentación del conjunto de Kansas en nuestro país.

Por María Fernanda Verdugo

A mitad de la década de los 90 y en pleno debilitamiento de la escena del rock con tintes más alternativos, The Get Up Kids irrumpieron y sentaron las bases de una nueva generación de seguidores del emo. Esto quedó demostrado la noche del jueves en el Domo San Diego.

En una jornada marcada por el fútbol, la espera se hizo agonizante luego de que los organizadores proyectaran el partido de la selección chilena en el recinto. En medio de quienes aplaudieron la idea y quienes demostraban su molestia por el retraso del show, finalmente se dio el vamos a lo que sería el primer encuentro con una de las bandas íconos del circuito noventero del emo punk.

El legado e impacto que tuvo el conjunto de Kansas en el circuito chileno quedó demostrado con el pulcro show de los nacionales Sin Perdón quienes, con más de 15 años de carrera a sus espaldas, se encargaron de abrir la jornada y tantear el terreno entre los fans que parecían no poder esperar más.

La banda sobre el escenario y el comienzo de los acordes de “Holiday” fueron la receta que dio como resultado el despertar del público y la explosión de euforia que invadió el show desde principio a fin. “I’m A Loner Dottie, A Rebel” y “Stay Gold, Ponyboy” fueron las elegidas para continuar y dejar sin aliento a los fanáticos que cantaban a todo pulmón las canciones que hoy ya se han transformado en un memorial del viejo emo punk.

El repaso a los discos Four Minute Mile (1997) y Something to Write Home About (1999), dejó en evidencia la emotividad que invadía a todos aquellos que tuvieron su adolescencia al principio de los dos mil. Canciones como “Valentine”, “Action & Action”, “Last Place You Look”, “Out of Reach” y “Red Letter Day” despertaron el sentimiento de nostalgia que se transformó en una atmósfera generalizada en medio de la audiencia.

El ánimo del público quedó demostrado en los stage dives y saltos que estuvieron presentes durante todo el show. Este escenario incomodó y sorprendió a los miembros de la banda que al parecer no están acostumbrados a una audiencia tan eufórica. Luego de dos episodios un tanto incómodos en que Rodrigo Palma (Saves The Day), el bajista chileno que sustituyó a Rob Pope tuvo que sacar a relucir su español para ayudar a Matt Pryor a calmar al público, lo demás se transformó sólo en agradecimientos y expresiones de emoción.

El repertorio más indie/alternativo del show estuvo a cargo de la interpretación de temas de su disco On a Wire (2002), y fue justamente un tema perteneciente a ese largaduración, “Walking on a Wire”, el elegido para dar el primer respiro a la banda tras la primera salida del escenario.

Los dos encore que siguieron y que fueron dando forma al término de la jornada, estuvieron marcados por momentos que de seguro se transformaron en inolvidables como los covers de “Close To Me” (The Cure) y “Beer For Breakfast” (The Replacements) en los que Matt Pyor, Jim Suptic, Rodrigo Palma, Ryan Pope y James Dewees demostraron que es posible interpretar tales clásicos de manera destacablemente original.

Luego de estas dos interpretaciones se vivió el momento más emotivo de la noche. La admirable voz de Matt se iluminó con el piano de James y se combinó con las de los fanáticos que entonaron a coro “I’ll Catch You”, canción que invadió los corazones del público que no pudo evitar emocionarse con esa guitarra acústica que los llevó a sus años de liceo y adolescencia.

Tras cerrar con “Shorty”, una canción cargada de energía, The Get Up Kids terminaron de sacar del baúl todas las memorias favoritas de quienes fueron parte del emotivo encuentro. Dejaron claro que la belleza de la música no tiene que ver con una maestría en la interpretación de los instrumentos, sino que la esencia se encuentra en todos los pensamientos y recuerdos que se pueden ver reflejados en su música.

La presentación de The get Up Kids en Chile revalidó la escena que ellos mismos reinventaron hace más de dos décadas y se presentó como un regalo para muchos de los nostálgicos que no aceptaban la idea de uno ver en vivo a una de las piezas fundamentales de la corriente emo rock. El sólo hecho de ser parte del debut de la banda en escenarios locales, fue razón suficiente para borrar un sueño por cumplir de la lista.

Setlist
Holiday
I’m A Loner Dottie, A Rebel
Stay Gold, Ponyboy
Lowercase West Thomas
The One You Want
Woodson
Valentine
No Love
Mass Pike
Action & Action
Forgive And Forget
Last Place You Look
Campfire Kansas
Red Letter Day
Don’t Hate Me
Walking On A Wire

Encore:
Close To Me (cover The Cure)
Beer For Breakfast (cover The Replacements)
I’ll Catch You
Ten Minutes

Encore 2:
Out Of Reach
Shorty