La legendaria actriz Debbie Reynolds, murió a los 84 años de edad. La actriz nominada al Oscar sufrió un derrame cerebral el miércoles por la tarde, apenas 24 horas después de la muerte de su hija, Carrie Fisher. Reynolds estaba haciendo los arreglos para el funeral en la casa de su hijo, Todd Fisher, cuando fue llevada al hospital después de una llamada al 911.

«Ella quería estar con Carrie,» su hijo Todd Fisher dijo a Variety.

Un icono de Hollywood por más de 65 años, Reynolds llegó en 1950 como la hija de Rosie O’Grady y Tres Little Words, el último de los cuales le valió una nominación al Globo de Oro a Nueva Estrella del Año. Ella iría de estrella en clásicos como Singin’ in the Rain, The Catered Affair, Bundle of Joy, The Unsinkable Molly Brown, y Charlotte’s Web, ganando cuatro nominaciones al Globo de Oro y una nominación al Oscar a lo largo del camino.

La relación de Reynolds con su hija, Carrie, era constantemente tensa. Se habían reconciliado en gran medida en sus últimos años, sin embargo, e incluso trabajado juntos en un documental titulado Bright Lights: Protagonizada por Carrie Fisher y Debbie Reynolds, que se estrenó en Cannes a principios de este año y saldrá su debut en HBO en 2017.

Aún faltan 3 días para terminar esta mal año.