Doce en punto, llego a casa con la camisa mojada por un mar de sudor impregnado en mi cuerpo, y con una satisfacción personal tal como si hubiera corrido una maratón, pero no. Volvía de uno de los mejores conciertos que he asistido en el año, los Ases Falsos en el Teatro Cariola.

La cita nos reunía a las 9 en punto, pero antes, a eso de las 8, el amado/odiado Leo Saavedra se presentaba con su voz y un pequeño teclado. Mostró un poco de su disco solista fuera de Primavera de Praga. Leo, quédate con ellos mejor.

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Concluído el calentamiento previo a lo que sería la cúspide. Leo se despidió con un «y ahora, Ases Falsos». El aire se ponía tenso, pero no de inseguridad, sino que de alegoría por lo que ya empezaba.

Yunta Inicial

La velada comenzó fuerte con Fuerza Especial, prendiendo de inmediato a todos los que estábamos presentes, desde el primer segundo en que sus manos comenzaron a tocar los instrumentos, hasta el último acorde que rozó la guitarra de Del Real. Este momento fue sin duda, la chispa que inició la explosión en el teatro de San Diego.

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Un Cristóbal bromista, apaciguador y carismático se presentó en escena (como siempre) manejando a su público con total dominio y sin aburrir. Pero aún así, logró hacer vibrar sin descanso con los primeros tres temas del setlist.

Segundo Aire

Si hay algo que me encanta en un concierto es cuando logran mantener el ritmo de una canción y lograr hacer entrar el segundo tema dentro del mismo, así lo hicieron con Plácidamente/No quiero que estés conmigo, dejando literalmente «la patá». En donde cada canción se sentía cargada de emociones por parte de la banda, desde la batería con J.P. Garín que entregó lo máximo, hasta Sánchez en el bajo, y sin menospreciar a Del Real con su brillante interpretación en el instrumento de seis cuerdas, donde sin vacilar se atrevió a desgarrar con solos atónitos y despampanantes. Briceño, se lució cantando y hasta se dio el lujo de bromear.

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En el último sonido de Cae La Cortina, Briceño le dedico unas palabras de apoyo a Jorge González, el cual como todos sabemos está en un delicado estado de salud, aludiendo a su calidad de buen músico y buena persona. Su homenaje se vio realizado al hacer un cover de la canción, Acaso Quieres Venir, cuya autoría se acuña a Los Updates, banda de synthpop conformada por González y su ex-mujer Loreto Otero. Esto le dio tribuna a Briceño para que nos propusiera una idea, grabar un vídeo musical, ya que estaba la afluencia de público precisa para el desarrollo de este, nos advirtió que era un proceso tedioso y que nos aburriríamos de hacerlo cosa que fue cierta. La mecánica consistía en que, como todo músico, su frustración es estar en un concierto y que todo salga mal, ergo, quería que fingiéramos que estaban tocando mal. ¿Nuestra recompensa? tocaría cualquier canción que nuestra cavernícola mente pidiera, ahí el público vitoreaba Lobo Mayor y Ola de Terror. Nada de esto pasó, lo cual me decepcionó mucho al ser viudo de los Fother Muckers. ¿Que recibimos a cambio? la tercera parte de este viaje musical.

Bloque Depresivo

Finalizada la tediosa grabación del vídeo, que incluyó rabietas, chistes, y un pequeño remember de Ola de Terror, comenzó la parte acústica del gig, donde Cristóbal no tuvo reparos en cantar a viva voz y con una emoción vibrante Séptimo Cielo, un favorito personal que cuenta la historia desde la perspectiva de un niño al cual le hacen bullying y muere. Fuerte. Pero que con la voz de Briceño resulta la combinación perfecta entre los trazos de su guitarra y su voz cálida. La guinda de la torta de este segmento (y de el concierto en general) fue la majestuosa entrada e interpretación de Información Sentimental, que, al mas puro estilo glamoroso de cualquier banda yanki, ocurrió en la conjunción del término de Simetría. Simón, Martín y compañía fueron entrando uno a uno para comenzar a interpretar poco a poco este tema, lo cual generó que el enardecido público se mojara aún más, de sudor claro.

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En ese momento, los Ases Falsos pagaron la deuda que tenían con un publico hambriento de ellos, necesitado de buenas canciones y alegrías. Con una potencia que hizo vibrar desde veinte para las nueve, hasta las once y media. Con canciones que hace mucho que no escuchábamos en vivo, con una garra y presentación en escena digna de un espectáculo de dioses.

Final Glorioso, Golpe A Golpe

Briceño comenzó contando una anécdota sobre un momento de su vida en que vivió al frente del Estadio Monumental. Sin entrar en discusiones de equipos de fútbol, la premisa de esta trataba acerca de la ineptitud que cometimos al no llevar agua al recital, cerrando con un «El agua no se le niega a nadie».

El nombre de esta parte del concierto se acuña tal cual, glorioso, y perfecto con Misterios del Perú, 2022, Búscate un Lugar Para Ensayar, Pacífico, Mi Ejercito, y cerrando con Estudiar y Trabajar. Cada uno de estos temas tocados a la perfección para nuestro deleite y dejando con una sed de más, pero que el tiempo, no pudo concretar.

Siendo justos, Briceño dijo que no tocarían la canción Los Ases Falsos (Fother Muckers) porque nosotros pagamos para ver a los Ases Falsos, no a los Fother Muckers, pero eso se desmoronó cuando tocaron 2022, siendo este, el único punto débil y en contra de la velada.

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En un momento de la noche, Briceño habló acerca de la capacidad del recinto, dejando entrever que ya estaban atrayendo mucho público, lo cual llevó a una pequeña insinuación sobre un posible show en el Teatro Caupolicán. Por ende, el recital en el Cariola podría ser el último que podríamos ver de la banda en un buen tiempo (al menos en Santiago). Y sin más preámbulos, la noche continuó su legado. Desmayos, sudor, excitación, y emociones fuertes encontradas fue lo que me provocó el show de Ases Falsos, junto con un enorme dolor hoy en la mañana en mi cuerpo por haber disfrutado tanto.

Nota del autor: Extraño a los FM