Es un cliché porque es verdad, pero los mejores álbumes son eternos. El álbum debut auto-titulado de Black Mountain, es sólo un registro de esta naturaleza. Es un nuevo rock clásico, con puntos de referencia claros, su sonido fresco, desconocido e irresistible. El trabajo de un pequeño colectivo de músicos que operan desde Vancouver, Canadá, lejos de cualquier bullicio industrial pero con firmeza en el ojo de su propia tormenta de la creatividad, el álbum debut de Black Mountain fue, por supuesto, un comienzo, pero también marcó un final.
Comenzó como el cuarto álbum de Jerk With A Bomb, el proyecto de 4 pistas en el dormitorio volvió a la banda de no-rock liderada por Stephen McBean que precedió a Black Mountain, las canciones crecieron de sesiones esqueléticas cortadas por McBean y Josh Wells y perfeccionadas en el camino en clubs vacíos de Norte América, junto con Ámbar Webber. “Primero hacíamos la pista maestra con guitarras y batería», recuerda McBean. «Matt [Camirand, bajo] se unió, y cambió el nombre de la banda después de un sueño de cómo la vida podría ser diferente en la sección B entre Black Flag y Black Sabbath. El compañero de habitación de Josh Jeremy [Schmidt, teclas] estaba al acecho alrededor. Le preguntamos si quería añadir algunos pitidos de sintetizador o lo que sea. Regresó con todas estas partes del teclado orquestadas, y le dijimos: ‘Oh, probablemente deberías unirte a la banda ahora».
Cortaron el álbum en la colmena y su jam space en Vancouver, grabando en «una habitación de cemento grande con un techo alto, acústica agradable, retumbante, mucha reverberación natural en una grabadora de rollo de casete de 8 pistas». Durante las sesiones, estas primeras pistas elementales encontraron su verdadera forma: la irónica mezcla y el vértigo de la «Música Moderna», con su saxo Roxy Music y Velvet-épico con “Don’t Run Our Hearts Around;” la hipnótica, con un ritmo lleno de gracia, «Druganaut;» la alegre prisa de “No Satisfaction;” la oscuridad, potente del blues de “Set Us Free;” la misteriosa oscuridad de “No Hits.” Saborea el compacto brillante y spacial de ese cósmico, pesado y sutil álbum debut, remasterizada y ampliada ahora con una serie de deliciosas canciones extras rescatados de los archivos de The Black Mountain Army. The Black Mountain (10th Anniversary Deluxe Edition) estará disponible a partir del 23 de Junio a través de Jagjaguwar.
El décimo aniversario de la edición de lujo es un doble LP que incluye 8 temas extras en limitada edición en vinilo de color, utilizando papel de impresión en la primera prensada de los envases gatefold lito-wrap. Los registros en sí son de color de edición limitada igualada doble vinilo gris, así como de vinilo negro estándar y doble CD del disco, que también están disponibles con la edición en papel de aluminio de impresión limitada. Incluye el álbum clásico original emparejado con el Druganaut 12 «, además de 4 temas inéditos.
“Una alegre, y una reconfiguración llena de aventura de la nostalgia de 60s y 70s que es tan fiel con el presente como amable con el pasado.» – Pitchfork, Best New Music (2005)
