Ariana Grande realizó un concierto en la noche de ayer en el Manchester Arena y terminó en pánico y tragedia tras una explosión de una bomba que mató a 22 personas, incluidos niños, e hirió a otras 59 más. Después de que terminó el concierto, a las 10:35 de la noche, se escucharon dos fuertes explosiones, entrando pánico todas las personas que salía del Arena Manchester.

La policía británica informó que el bombardeo se produjo en el vestíbulo del recinto. En un comunicado, la policía dice que están tratándolo como “un incidente terrorista” y están trabajando con la red policial y de inteligencia del Reino Unido y sus respectivos socios. Se cree que el ataque se llevó a cabo por un solo hombre, que murió en la explosión, utilizando un artefacto explosivo improvisado. El representante de Grande ha confirmado que la cantante, que ha twitteado un comunicado, se encuentra “bien” y que se está llevando a cabo una investigación. Mira el comunicado de la policía y las imágenes de la multitud que sale de la arena al final de la nota.

Varios relatos de primera mano del concierto han surgido. David Richardson, que asistió al concierto con su hija de 13 años de edad, dijo al Manchester Evening News que después de que terminó del show, oyó las dos explosiones y luego vio humo. “Todo el mundo escapó”, dijo. “Algunas personas resultaron heridas. Vimos la sangre en las personas cuando llegamos al exterior. La gente estaba corriendo por todo el lugar“.

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