Por Andrés Cornejo

Tres amigas desde la escuela consiguieron su sueño de formar una banda, y no solamente eso, sino haber colaborado con sus ídolos de Sonic Youth y estar bajo el mismo sello de sus bandas preferidas como Yo La Tengo, Matador Records. En tiempos donde la música de guitarra parece desvanecerse, llega Horsegirl para revivir el rock de guitarras mezclando varios estilos como el slacker rock de Pavement, el noise rock de My Bloody Valentine y el post punk de Joy Division, simplemente “Versions of Modern Performances”, como su título bien lo indica. 

Hace pocos días, Horsegirl sacó su esperadísimo segundo disco “Phonetics On and On”, el cual deja de lado la complejidad sonora de las guitarras ruidosas con afinaciones experimentales, acercándose a un sonido más limpio y simple pero, por sobre todo, atrayente y novedoso. Temas como <<2468>> y <<Switch Over>> son piedras angulares en esta nueva dirección que logran hipnotizar fácilmente por su pegajoso y entretenido beat.

 

A continuación, la guitarrista de Horsegirl, Penelope Lowenstein nos cuenta en exclusiva sobre el proceso creativo de este disco, la influencia de la productora Cate Le Bon, cómo equilibrar una banda con una carrera universitaria en marcha, y mucho más, aquí en Ruta Rock. 

 

En este nuevo disco, exploran nuevos sonidos como el violín en «2468», además de incorporar un ritmo country, lo cual también es algo nuevo para ustedes. ¿Cómo surgieron estas ideas y qué los motivó a experimentar con estos elementos?

Nos tomamos una larga pausa después de escribir nuestro primer LP y antes de intentar escribir este. Así que, simplemente crecimos y nuestros intereses cambiaron, incluso la música que estábamos escuchando. Y cuando nos sentamos a idear este álbum, la idea de recurrir al minimalismo o de experimentar más nos llegó de manera natural.

Una gran parte de los arreglos de violín y todo eso fue que queríamos capturar la esencia de lo que significaba tocar juntas como trío, lo cual nos dimos cuenta de que suena súper vacío, como un espacio natural y extraño que surge cuando solamente hay una guitarra, lo que permite que cada arreglo sea mucho más creativo de lo que sería si estuvieras ocupando un montón de espacio, por lo que otras secciones pueden ser más interesantes.

Con una guitarra limpia y un enfoque más sencillo en los demás instrumentos, los arreglos de violín cobraban una dimensión especial y destacaban por sí mismos. Esas dinámicas dentro de la banda fueron muy emocionantes para nosotras, especialmente después de haber hecho un disco tan ruidoso. Este nuevo enfoque representaba un desafío que estábamos ansiosas por explorar.

 

¿Cómo fue trabajar con Cate le Bon, hubo alguna anécdota o enseñanza de ella que recuerden?

Realmente nos impulsó, porque no estábamos acostumbradas a experimentar en el estudio. Queríamos una energía juguetona y explorar nuevos instrumentos y sonidos, y Cate nos orientó en esa dirección. Fue nuestra voz externa que nos decía: “Esto suena bien” o “Pueden tocar esto y seguirán sonando como Horsegirl”, las cuales confiábamos y no cuestionamos, ya que somos grandes fanáticas de su trabajo.

Recuerdo que estábamos nerviosas al momento de probar nuevos instrumentos como un sintetizador porque venimos de un contexto DIY. Nos preguntamos: “¿Estamos perdiendo nuestra esencia?” “¿Dejaremos de sonar como Horsegirl?” y ella nos diría: “Lo que sea que hagan sonará raro porque ustedes son una banda extravagante, pero ese encanto siempre estará ahí.” Eso fue algo que nos tranquilizó, saber que podíamos seguir experimentando sin perder nuestra identidad. 

 

Tanto en el estudio como en sus presentaciones en vivo, la técnica que tienen sobre sus instrumentos es impresionante. ¿Cómo comenzaron a tocar sus instrumentos y cómo ha evolucionado su técnica con el tiempo?

Creo que una de las cosas más especiales sobre cómo escribo mis ideas es que siempre compongo junto a Nora (guitarrista/vocalista principal). Nos conocemos desde muy jóvenes, por lo que solo conozco esa dinámica de escribir con ella. Siempre vemos nuestras ideas como algo colaborativo en un espacio de retroalimentación mutua, porque vemos todo como una pieza que tiene que encajar perfectamente. 

Muchas bandas pueden caer en la trampa del ego, donde todos quieren tocar algo muy complicado para demostrar lo que saben hacer. Pero para nosotras, alguien tiene que tocar lo mismo una y otra vez para darle espacio a la otra para que toque algo más interesante. Siempre lo vemos como un balance, donde cada miembro debe saber cuándo contenerse para dejar que la otra haga algo genial. Es una dinámica de apoyo mutuo.  

 

El título del álbum “Phonetics On and On” sugiere una exploración del lenguaje y la comunicación. ¿Cómo se explica este concepto dentro del disco?

La palabra “phonetics” (fonéticas) capturó perfectamente la idea del disco, tanto lírica como sonoramente. En este trabajo estábamos simplificando las cosas, y estábamos muy atraídas por lo que llamábamos los “elementos rudimentarios” de la composición, es decir, los bloques más simples de una canción: verso, coro, verso, coro. Do da da do do do, esas son las fonéticas del lenguaje y también de la composición. Y en este disco queríamos escribir canciones que se puedan tocar con una guitarra en afinación estándar, a diferencia de nuestro primer trabajo que usábamos afinaciones raras. Encontramos belleza en la simplicidad de los elementos básicos de la composición.

Además de la banda tienes otros compromisos como la universidad ¿cómo lograste equilibrar la grabación de «Phonetics On and On» con los estudios?

Realmente nos gusta tener la estructura de la escuela mientras la banda está en marcha. Creo que nos ha permitido tener una actitud más saludable y nos da una razón para no estar de gira todo el tiempo, ya que pienso que eso causa que tantas bandas se separen tan jóvenes. Y para nosotras, tener el espacio de solo hacer tours cuando estamos de vacaciones es bien saludable, especialmente considerando que firmamos siendo adolescentes. Pero en otros momentos, sí encuentro estresante equilibrar los estudios con Horsegirl.

 

¿Cómo lo tienen planeado frente a las giras que empiezan el próximo mes?

Aún tenemos unas vacaciones de primavera así que no me perderé mucho.

 

Hablando de conciertos, ¿han tenido la oportunidad de conocer algo sobre Chile o Sudamérica? ¿Les gustaría visitar la región y presentarse frente a sus fanáticos allí?

Me encantaría tocar en Sudamérica. Mi papá es venezolano, así que me dijo que debería tocar en la región. Así que tan pronto como podamos nos gustaría ir.