La familia de Chris Cornell llegó a un acuerdo confidencial con el médico que cuidaba al cantante en el momento de su muerte, como informa Rolling Stone. La viuda de Cornell, Vicky Cornell, y sus dos hijos demandaron al Dr. Robert Koblin por negligencia en 2018 y resolvieron la demanda el mes pasado.

Cornell murió por suicidio en mayo de 2017, y un informe de toxicología reveló múltiples medicamentos recetados en su sistema, incluidos butalbital, lorazepam, pseudoefedrina y barbitúricos. En la demanda original, la familia de Cornell sostuvo que el tratamiento de Koblin había contribuido a la muerte del cantante, alegando que los medicamentos habían «deteriorado [su] cognición, nublado su juicio y lo habían hecho participar en comportamientos impulsivos peligrosos que no podía controlar y así costándole la vida«.