Si Glenn Danzig le dice que no quiere tomarse foto, es probablemente que mejor le tomes atención a su palabra.

Eso es lo que le sucedió a un asistente persistente de un concierto llamado Navid Farsi. Como indica TMZ, durante un concierto de Danzig en California, Farsi desafió las repetidas política de no-foto de la banda y trató de hacerla de igual forma a rockers metaleros.

Su primer intento fue cortado rápidamente por el propio Danzig, que le arrebató el teléfono a Farsi y lo tiró fuera del escenario. Sin embargo, la segunda vez, fue en el autobús de Danzig, el frontman le paró los carros literalmente y le mandó un estrangulamiento.