Ghost es una banda que ha dado un montón de qué hablar desde que apareció el debut Opus Eponymous, además, han crecido exponencialmente con cada disco, pero para algunos, la calidad musical no ha estado a la par de la exposición mediática. La secuela llamada Infestissumam fue una decepción si lo comparamos con el anterior, con Meliora nos entregaron un material mucho mejor, pero aún así, no podíamos olvidar el álbum debut.

Ahora, nos encontramos con el cuarto larga duración, Prequelle, el que sorpresivamente, es un disco muy dinámico con varios pasajes interesantes que descubrir, pero que a la vez nos deja una sensación de qué faltó algo. En algunos de los discos anteriores hay tracks bien trabajados que no tienen momentos flojos, pero en este último, se construyen momentos, que son opacados por canciones olvidables y monótonas.

El primer single “Rats”, nos inyecta unos riffs pegotes con una vibra algo medieval, luego nos encontramos con “Faith”, que tiene un sonido de heavy metal retro.  Son dos canciones perfectas para que la banda nos enganche en la atmósfera que quieren crear, pero nuestra atención fue interrumpida con la instrumental “Miasma”, que fuera de ese saxofón, no tiene ningún elemento recordable.

Después de ese momento para el olvido, Ghost nos introduce en “Dance Macabre”, una canción extrañamente pegajosa que casi suena como pop-disco, y que resulta ser una de las mejores canciones. No sé ustedes, pero esta canción nos recuerda mucho a ABBA + un riff potente. Después se nos viene la balada “Pro Memoria”, que se acerca mucho a los tracks más melódicos que encontramos en Meliora.

Desafortunadamente, otra vez nos encontramos con una pieza relleno llamada  “Helvetesfonster”, la que parece ser una versión más extendida y olvidable de “Miasma”. El track final “Life Eternal”, cierra el álbum de una manera elegante, y que nos acerca aún más a la temática constante del disco: aceptar la muerte.

Aunque Ghost no ha logrado recuperar la mística del primer disco (con sólo 1 miembro original en la banda, parece ser una tarea imposible), Prequelle es un buen disco que captura muchos de los matices más pesados de la banda, y también los lleva más allá con esa esencia pop setentera que encontramos en varios tracks anteriores de la banda. Si le sacamos momentos innecesarios entre canciones, quizás este podría ser uno de los mejores discos en su carrera. Aún así, tenemos un buen álbum para agregar a la historia de Ghost.