Micachu and The Shapes regresan luego de tres años después del lanzamiento de su último disco ‘Never‘, casi por accidente: el trío de amigos decidió ensayar en un estudio al Este de Londres, y se encontraron inmersos en un jam de una hora de duración. El baterista Marc Pell tenía una grabadora de campo Edirol en la mano, y sin el conocimiento de sus compañeros de banda, grabó toda la sesión; Pell, Mica Levi, y Raisa Khan estaban tan enamorados de esos experimentos fuera de la manga de audio, que se convirtieron en los cimientos de un nuevo disco.

«Para mí es lo más libre que hemos sido», explica Levi. En lugar de aparecer al estudio con canciones escritas, el trío comenzó con una improvisación de colaboración, de las que Levi eligió secciones para convertirlas en canciones, escribiendo letras para la totalidad del álbum «sin parar, en una avalancha.»

Con una escucha, es fácil saber por qué les encantó las pistas. ‘Good Sad Happy Bad’ mantiene la sensibilidad avant-pop que la banda ha sacado en esfuerzos anteriores, combinando la ligereza y la rebote de sus mejores singles con las texturas sonoras de grabaciones de campo, efectos industriales junto con la instrumentación sencilla. Voces afectadas de Levi muestran un tono emocional de fácil lectura, en lugar confía en el lirismo quijotesco, la repetición y la inmersión en el paisaje de la canción, para evocar cálidamente – en lugar de mostrar – los sentimientos que sustentan las canciones.

La energía incontenible a través del álbum, tanto de las canciones optimistas y de un puñado de canciones tristes, parecen ser un resultado directo del proceso de grabación en vivo. «Los jams son realmente una descarga bastante saludable, es una manera de sacarse las cosas sin estar conscientes de ello ni tomar decisiones al respecto,» dice Khan.

Por el contrario, debido a que la banda trabajó en las mezclas finales juntos durante varios meses – en lugar de en un estudio de multi-pistas tradicional, en un período más corto – Pell encontró un nuevo grado de creatividad. «Creo que la mejor parte de batería que he escrito es el palo clickiando al principio de ‘Peach‘ – un momento, explica, que no habría sido capaz de darse cuenta sin el lujo de ver las pistas grabadas como algo mas que simples canciones, sino mas bien como colecciones de las ideas sónicas.

En los años transcurridos desde el último trabajo de la banda juntos, Mica Levi ha sido la persona más joven en ser un artista en residencia en The Southbank Centre y su estrella en el mundo de la composición moderna también ha aumentado, en gran parte como resultado de su trabajo en el destacado film de Jonathan Glazer del 2014, ‘Under the Skin‘, cuya profundidad inquietante es debido en parte a, la puntuación de otro mundo precisa de Leví, por la que ganó un Premio de Cine Europeo y fue nominado para un premio BAFTA.

Mientras ella sigue trabajando en proyectos de composición, Levi da la bienvenida a un retorno a una experiencia un poco mas «social, física» de estar en una banda de gira.