Ayer por la noche se realizó una gran presentación en nuestro país, fue el debut del gran Sam Beam aka Iron & Wine, el cual debutó en la Ex Oz realizando un concierto magistral junto a sus dos guitarras electroacústicas.
Antes de comenzar la presentación del folkero estadounidense, los nacionales de Matorral daban el inicio a una noche cargada de tranquilidad, relajo y mucha emotividad, mostrando material de su último disco de estudio Remoto Control, además de otras canciones que cuenta la banda en nuestra actualidad, y también material de Gabriel, su próximo LP de estudio el cual cuenta con su primer single, Boleta de Cambio.
La presentación de los nacionales fue bastante prolija, realizando un show de aproximadamente 45 minutos, donde los asistentes a la presentación los ovacionaron como debió haber sido y el respeto a una gran banda nacional. Posteriormente, a las 21:15 hrs. se baja la música y sube un tímido Sam Bean a mostrar su mejor repertorio en tierras nacionales.
Junto a sus dos guitarras electroacústicas, Iron & Wine se presentaba bajo un público muy respetuoso, y atento a todas las movidas que realizaba Bean en el escenario, este último agradeciendo a sus fans desde el inicio y hasta el final del concierto, y pidiendo al público presente que canciones querían escuchar. Respecto a esto último, la gente solicitaba variados temas, desde Tree by the River, Each Coming Night, Hallelujah, pasando por Boy With a Coin y también el cover a The Postal Service con Such Great Heights, cumpliendo casi todas las peticiones que les solicitaba el público.
Sam Bean realizó un repaso de toda su discografía y mostrando material de su último disco de estudio, el cual lo traía a Chile con Ghost on Ghost (2013). En resumidas cuentas, Iron & Wine dejó en claro que es un gran compositor y letrista, donde sus melodías daba una emotividad perfecta para una noche fría, convirtiéndola en algo más enternecedora y que a mi personalmente, casi se me salen algunas lágrima en algunos temas que disfruté de su repertorio. El show duró aproximadamente una hora y 45 minutos, dejando bastante contentos a los asistente y algunos bastante depresivos bajos unas magistrales interpretaciones que ojalá podamos volver a escuchar nuevamente en Chile en un futuro cercano, o como el dijo en el escenario, que volvería la otra semana a seguir tocando.
Se agradece la invitación de Estudio Estéreo por este gran evento que como página y los fans asistente, disfrutaron como debió haber sido.