Por Ignacio Bataller
Fotos por Juan Kattan – Kattan.ph
Una agradable sorpresa en el ámbito de los conciertos masivos fue el anuncio de que Simple Minds tocaría en el Movistar Arena, un escenario que la banda merece debido a sus años de trayectoria. En el 2025, en una época post pandemia, la banda de Jim Kerr y Charlie Burchill necesitaba demostrar que son mucho más que la canción «Don’t You (Forget About Me)» del Breakfast Club. Este tema, aunque les dio fama, representa solo una parte de lo que realmente son como banda, conocido por sus fanáticos más acérrimos. Esta fue una oportunidad para mostrarlo a un público más amplio.
Tras la apertura de puertas a las 18:00 hrs, los primeros en llegar tomaron posiciones, aunque la música no empezaría a sonar hasta dos horas después, a las 20:00 hrs. Fue entonces cuando la reconocida banda nacional Upa, ahora conocida como Upa+, marcando una nueva era para ellos, inició una fiesta nostálgica que nunca perdió calidad en el escenario y la puesta en escena. Esta banda chilena trajo lo mejor de su repertorio de éxitos, que en términos de género no distan mucho de lo que hacen los escoceses y pertenecen a una generación cercana. El Movistar Arena se llenó lo suficiente para hacer más amena la espera del plato de fondo que estaba por llegar.
Finalmente, a las 21:00 hrs, Simple Minds subió al escenario para hacer sonar su synth pop mezclado con un rock influenciado por el post punk, un sonido que definió una época musical y que fue revivido brillantemente.
La banda transformó rápidamente el concierto en una verdadera fiesta, logrando conectar con un público de todas las edades. La formación actual demostró su talento sobre el escenario, con una presencia escénica totalmente acorde al nivel del evento.
Jim Kerr interactuó constantemente con el público durante todo el evento. Se desempeñó de manera excelente como maestro de ceremonias y frontman, brindando espacio a cada miembro de la banda para brillar. A pesar de ello, sus propios momentos en el escenario y su compromiso con la presentación en vivo fueron destacados. La velada transcurrió rápidamente, marcada por canciones como «Sanctify Yourself«, «Someone Somewhere in Time«, «See The Lights«, y la icónica «Don’t You (Forget About Me)» de The Breakfast Club, que, aunque fue el momento más alto y coreado de la noche, no restó impacto al concierto en su conjunto.
El público disfrutó bailando y coreando diferentes temas, inmerso en la puesta en escena y en el talento de cada músico, lo que resultó en un viaje nostálgico para muchos asistentes y un reencuentro perfecto de la banda con su fervorosa base de seguidores en el país.
