Shudder to Think volvió oficialmente a la actividad tras 17 años de ausencia en los escenarios, con una serie de shows agotados en Boston, Washington D.C. y Nueva York, y retomará su gira con fechas en la costa oeste hasta el 11 de noviembre, cuando cierren en Los Ángeles. Coincidiendo con esta vuelta, la banda lanzó “Thirst Walk” y “Playback”, su primer material nuevo en casi 30 años. Los singles, grabados de forma orgánica y espontánea entre estudios caseros y el Pink Ape Studio de Craig Wedren, recuperan la esencia melódica y experimental que marcó su sonido clásico.
El regreso musical se produce tras la celebración del 30º aniversario de Pony Express Record, álbum que Pitchfork calificó como una obra única del auge alternativo de los ’90 y que Stereogum describió como “pop progresivo de una dimensión paralela”. Desde finales de esa década, los miembros del grupo se han dedicado principalmente a la composición para cine y televisión, destacando los trabajos de Wedren en Yellowjackets y Wet Hot American Summer, y los de Nathan Larson en High Fidelity y The Skeleton Twins. La formación actual reúne a Wedren, Larson y Adam Wade junto a Clint Walsh y Jherek Bischoff.