Siguen surgiendo detalles sobre el fallecimiento de Sam Rivers, histórico bajista de Limp Bizkit, ocurrido el pasado sábado 18 de octubre en St. Johns County, Florida. Según reportó TMZ, las autoridades respondieron a un llamado por una “persona inconsciente en paro cardíaco”. Aunque la causa exacta de muerte aún no ha sido determinada, el informe policial describe el caso como una “muerte asistida”, es decir, de un paciente con una enfermedad grave cuyo fallecimiento era un desenlace esperado.
Rivers, de 48 años, había enfrentado diversos problemas de salud en los últimos años. En 2017 se sometió a un trasplante de hígado tras una larga lucha contra una enfermedad hepática derivada del consumo excesivo de alcohol. En sus recientes presentaciones, el músico fue visto vistiendo una polera con el mensaje “Fuck Cancer”, lo que generó especulaciones sobre una posible batalla contra el cáncer. Su compañero DJ Lethal confirmó indirectamente la sospecha al compartir una foto del bajista con el hashtag #fuckcancer.
A pesar de la pérdida, Limp Bizkit anunció que seguirá adelante con su próxima gira por Latinoamérica, que comenzará el 29 de noviembre en la Explanada del Estadio Banorte de Ciudad de México, con la participación de Yungblud, 311 y otros artistas.
El vocalista Fred Durst rindió homenaje a su compañero con un emotivo video, afirmando: “Es tan trágico que no esté aquí ahora. He derramado galones de lágrimas desde ayer, y no dejo de pensar: Sam es una leyenda».
La banda regresará a Chile 13 de diciembre al Estadio Monumental, junto con 311, Youngblud y más. Entradas disponibles vía Ticketmaster.