La banda de nu-metal Silly Goose, conocida por sus audaces presentaciones en lugares poco convencionales como restaurantes Subway y estaciones de servicio, volvió a dar que hablar tras la detención de su vocalista Jackson Foster en Chicago. El incidente ocurrió durante un show improvisado sobre una camioneta estacionada en una estación BP, donde Foster fue arrestado por allanamiento de morada, a pesar de asegurar que había recibido permiso de los empleados del local.
El vocalista criticó el arresto en redes sociales y anunció que deberá comparecer en tribunales el próximo 2 de septiembre. Lejos de amedrentarse, la banda realizó una fiesta de escucha al día siguiente frente al lugar del incidente y también logró actuar en el festival Lollapalooza, tras haberlo “invadido” de forma no oficial el año anterior.
El enfoque DIY del grupo ha dado frutos: recientemente firmaron con el sello Blue Grape Music y lanzarán su próximo álbum, Keys to the City, el 10 de octubre.
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