Una tarde de 2016 estando en Valparaíso, se podían sentir las vibras musicales del festival Rockódromo, a lo que a una cierta hora de la noche (sin certeza de cual era el horario) el escenario de Plaza Sotomayor se iluminaba para recibir a una banda independiente. Una explosión venida de la naturaleza, llena de intensidades y una energía que solo traía fiesta, siendo este mi primer acercamiento con Kuervos del Sur.

Una memoria mía, que se complementa y triplica con la celebración que se vivió la noche del viernes 11 de agosto en el Teatro Teletón, en donde el recinto topó con el lleno, recibiendo el apoyo mediático de Radio Futuro, y contando de una producción notable dentro de esta fecha. Algunas encuestas amigables con el público en la espera, de parte del medio musical que los auspiciaba, unos precios altos en comestibles que a muchos le quitaban las ganas de comer, y un público fiel a la espera de lo que sería una de las mejores presentaciones de los Kuervos en Santiago. Se apagaban las luces, y la corriente potente que creaba la alegría de los expectantes traía al escenario a los cumpleañeros de esta jornada, que venían a pasarlo bien en su propia ley.

La primera corrida comenzaba con el repaso del primer disco de estudio, Porvenir, en donde el impresionante coro de los fanáticos comenzaba a imponer presencia, y las canciones de este primer trabajo sonaron potentes, con todas las virtudes del grupo en su máxima expresión. Jaime Sepulveda despertando todos los elementos de la tierra con su potente voz, Pedro Durán con su simpleza y movidos solos de guitarra, César Brevis con su intensa mirada potenciada de sus lineas de bajo, Jorge Ortiz saltando alegremente con su charango eléctrico avivando la fiesta, Alekos Vuscovic dando vida a las teclas de su extenso talento, y Gabriel Fierro demostrando su capacidad rítmica en la batería. Todo estaba dando para una jornada larga y enriquecedora.

Terminada esta parte, se dio un intermedio para que se cambiará de escenario, dando inicio a otro tipo de formato dentro de esta noche. Una corrida de la sesión unplugged de la banda, en donde destacó la hermosa colaboración del miembro histórico de Inti Illimani, José Seves, que con su experiencia y buena entrega, completó esta parte de la tocata que se destacó por su intimidad, calidad y unión de voces de distintas generaciones, pero con un mismo fin, la música como medio de cambio.

Para finalizar toda esta gran avalancha de canciones, se tenía que dar broche de oro con su disco El vuelo del Pillán, en donde la potencia sonora, los detalles de cada instrumento y las explosivas composiciones se tomaron el teatro por completo, siendo una gran fiesta que culmino con grandes discursos, agradecimientos y muchas alegrías, las cuales todas fueron compartidas entre cada uno de los presentes.

Muchas veces la vida te dice que no, y que las cosas son difíciles de lograr en un país como el nuestro, en donde la adversidad siempre es un tema en contra para cuando uno quiere surgir como músico o banda. Ayer los Kuervos del Sur nos dijeron que todo es posible, que la paciencia puede ser eterna, pero que las riquezas siempre llegaran cuando uno menos se lo espera. Feliz cumpleaños Kuervos, han sido 10 años, pero que sean más, todo sea por el buen rock chileno que están otorgando a nuestras vidas, y la constancia con la que están combatiendo la corriente.