Cuando Netflix comenzó a poner la distribución de series originales en su modelo de negocio, muchos observaron la forma que la compañía de streaming era mantener incluso sus proyectos más pequeños y más extraños activo. Debido a que Netflix no declara públicamente sus números de audiencia, sus espectáculos pueden utilizar participación de la audiencia y prestigio crítico como sus estándares primarios de medición de forma en que las redes de difusión de calificación dependientes no pueden. Y aparte de la cancelación ocasional de una serie de bajo perfil como Lilyhammer y Hemlock Grove, la mayoría de los espectáculos se han dejado ver en sus visiones por un buen tiempo.

Unos incidentes no hacen del todo una tendencia, pero ahora está buscando como si Netflix está más dispuesto a caer el martillo sobre una preocupante situación que ya está ocurriendo hace un tiempo. Hace unos meses atrás ya confirmaban el fin de la recién estrenada tercera temporada de Bloodline. Apenas la semana pasada, The Get Down fue cancelada después de una temporada de dos partes, la primera serie de Netflix en finalizar después de sólo una temporada. Y hoy, Netflix anunció que otra serie ha sido cancelado: Sense8 de Lana y Lily Wachowski.

Sense8 era una visión audaz, y una prueba de que la inclinación tal vez de los hermanos Wachowski eleboraba una construcción del mundo que podría ser mejor servido en la forma más larga como serie. Fue uno de los espectáculos más radicales en el aire, desde su política a la consideración abierta de género y la fluidez cultural. Se juega con las ideas que la mayoría a base de acción y ciencia ficción no tocaría, y por eso, es una pérdida que sentimos a partir de hoy.

Pero también es un paso que tiene sentido particular a la luz de los CEO de Netflix, Reed Hastings comentó acerca de cómo la red debería, en todo caso, a hacer más apuestas en el servicio y la cancelación de más programas.