El pasado 27 de Agosto se cumplieron 25 años de lo que es uno de los discos más importantes (y para algunos el más trascendental) de la década de los 90’s: Ten, de Pearl Jam. Trabajo aclamado y recordado por sus fans y los críticos de la época, y que después de 10 álbumes de estudio sigue siendo uno de los más importantes de la banda.

Es sabido que el grupo se formó con el fin de “Mother Love Bone” y miembros de “Temple Of The Dog” (proyecto que surge como homenaje al fallecido Andrew Wood, vocalista de Mother Love Bone y amigo de Chris Cornell), al cual se le sumó el guitarrista Mike McCready, el baterista Dave Krusen y un desconocido -hasta el momento- cantante, Eddie Vedder.

Según Jeff Ament, el ambiente de la grabación del álbum era más como un “a ver qué sale” que algo calculado. Quizá en esa inmediatez (las sesiones no duraron más de un mes) y en esa falta de ambición radica el secreto tanto del disco como de la banda. Sumado a una voz particular que le da ese toque de enojo, dolor, pero a la vez mucha potencia.

La química que se dio entre los miembros de Pearl Jam, le otorgó a “Ten” ser un álbum entrelazado entre todas sus canciones, que es imposible no disfrutarlo sin dejar alguna afuera. El título del disco es básicamente el número de camiseta del basquetbolista de la NBA, Mookie Blaylock.

Al integrar a los nuevos músicos, les entregan una cinta que incluía tres demos, “Alive” (anteriormente llamada “Dollar Short” y primer single de la banda) la cual fue escrita por Eddie Vedder y se basa en una historia real del vocalista, en donde se entera que su padre era más bien su padrastro y que su verdadero padre había muerto hace un par de años. Los otros temas que incluía la grabación fueron los demos de “Once”, una canción que cuenta como un hombre no pudo soportar la traición y se convirtió en un asesino en serie; y “Footsteps”, una continuación a la historia anterior en la que se le da muerte al mismo hombre.

El resto de integrantes quedaron gratamente sorprendidos con lo enviado por Vedder, el cual fue invitado a Seattle y este les llevaba una sorpresa que con los años se convertiría en el himno más recordado de Pearl Jam: “Black”, una canción que la banda no quiso lanzarla como sencillo, puesto que creían que se perdería el sentimiento que esta posee, centrándose en un monólogo que sostiene un hombre con el corazón roto, y un constante recuerdo de la mujer a la que amó.

Al integrar a Vedder a la banda, esta firmó un contrato con Epic Records para que en conjunto con Rick Parasher empezaran a grabar lo que sería el comienzo de una gran carrera. La banda ya poseía varios temas terminados (“Porch”, “Deep”, “Why Go” y “Garden”) y solo bastó una semana para que estas estuvieran terminadas.

El segundo single de la banda y que comenzó a ganar popularidad fue “Even Flow” (una oda a la libertad y a no temer a vivir la vida del modo que queramos a pesar del que dirán), canción que en Abril de 1992 alcanzó el puesto número 3 del “Mainstream Rock Tracks”. Matt Cameron, actual baterista confesó sobre el video: “A pesar de que la he tocado miles de veces desde que estoy en la banda, esa canción refleja mucho el alma de Pearl Jam. A Pesar de que es ya casi normal tocar el tema, esa canción tiene unas agallas realmente increíbles”.

Lo siguiente fue aumentar su frecuencia en Estados Unidos, la cual la encargada de hacer esto fue “Jeremy”, tocando un tome controversial en esos años: el bullying. Lo más impactante es que está basada en una historia real del joven de 16 años, Jeremy Walde Delle quien se suicidó en frente de su clase. El videoclip (el segundo, dirigido por Mark Pellington) de la canción fue elegido por MTV como el tercer mejor videoclip de la historia en 1999.

El éxito fue tan grande, que junto con “Nevermind” de Nirvana, se convirtieron en los discos más vendidos de ese año y emblemas del Grunge (generando hasta el día de hoy debates sobre ¿Cuál es el disco más importante de la historia del grunge?). La popularidad de la banda aumentó, girando por Europa y encabezando el segundo Lollapalooza junto a Red Hot Chili Peppers, sus amigos de Soundgarden, Ice Cube y Ministry. Llegando incluso a participar del “MTV Unplugged” en 1992.

El resto de las canciones también posee una línea de vivencias humanas, -que siento personalmente- hacen que ten sea tan cercano a la gente y sus fans. Y que cualquier persona, sea o no seguidor de la banda puede escuchar el álbum sin problemas.

Ya mencionamos sobre “Even Flow”, “Alive”, “Once”, “Footsteps y “Jeremy”. Pero queda “Why Go” una historia de una chica internada por consumo de drogas y como eso destruye la relación con su madre. “Oceans” relata la experiencia de perderse en las olas mientras se practica surf. “Deep” partiendo cumple con la función de ser la parte más pesada del disco, tocando temas de abuso de drogas y sexual. “Porch” un llamado a combatir en conjunto el individualismo. “Garden” -personalmente mi favorita- es un canto a la resiliencia con frases como “The interpretation of the eye, so deceptive the perversion of the soul, nauseatingly fast i do not question our existence i question our modern needs”. “Release” fue una improvisación de Eddie Vedder en la que le habla a su padre y de las veces en que lo vio siendo presentado como un “tío lejano”. Finalmente, el álbum termina con un tema instrumental “Master/Slave”.

Después de la primera edición en 1991, basto un año para que el álbum fuera editado en dos opciones de las que se agregaban varios bonus tracks (un cover con algunas modificaciones en la letra de “I’ve Got a Feeling” de The Beatles y los lados b “Wash” y “Dirty Frank” además de una versión en vivo de “Alive”).

“Ten” alcanzó el puesto número 2 en la lista “Billboard Album Chart” en 1992, obtuvieron el “Status Diamante” por vender 10 millones de copias y fue certificado 13 veces como disco de platino por la RIAA.

Entonces, “Ten” es y será uno de los pilares de la música de los 90’s, con una voz que desde ese entonces se ha tratado de imitar, canciones con contenido, critica y emoción. Y que cada vez que pisan un escenario sus seguidores las corean como si fueran la primera vez que las escuchan, podrán pasar 25 años más y las canciones tanto del álbum como las de la banda seguirán sonando como en sus inicios.