Chris Cornell es considerado por muchos como una de las grandes voces que ha dejado la década de los 90’s, incluso llegó a ocupar el puesto número 9 de los mejores cantantes de la historia del rock en la lista hecha por la revista Rolling Stone. Todo esto logrado por su trabajo en bandas tan reconocidas como Soundgarden, Audioslave y Temple Of The Dog.

Pero si hay un aspecto de su carrera en el cual podemos encontrar altos y bajos, es su carrera como solista. Pasando por el alabado álbum Euphoria Morning (1999), hasta la criticada jugada para entrar en la música moderna junto a Timbeland con el disco Scream (2009).

Tras 6 años desde este criticado trabajo, Cornell regresaría con Higher Truth, un álbum que fue inspirado y moldeado en base a su última gira acústica (de la cual se hizo un registro en vivo, Songbook).

Higher Truth se compone de canciones rodeadas en un ambiente más calmado pero que en su debido tiempo sacan a lucir las guitarras eléctricas y los gritos clásicos del vocalista, pero sin dejar de lado el perfil folk que aquí caracteriza a Cornell.

Este estilo más tranquilo va acompañado de las historias de amor y desamor que se cuentan en este disco. Evitando tanta metáfora con simbolismo, las letras del proveniente de Seattle son directas y sencillas, un cambio que podría molestar a algunos considerando que él tiende a ser más críptico a la hora de escribir (sobre todo en Soundgarden).

El objetivo que se propuso a la hora de preparar las canciones era claro, obtener un sonido que generara cercanía e intimidad. Algo que el productor de este álbum Brendan O’Brian (Stone Temple Pilots/Pearl Jam/Incubus) logró capturar con éxito.

A pesar de que la mayoría del disco tiende a ser un tanto predecible por el sonido mencionado anteriormente. Hay momentos en que logra sorprender usando mandolinas, arreglos de piano y en otros mezclando sonidos más árabes, demostrando que Cornell aún viene con ganas de experimentar con su música.

En conclusión, aunque este disco no entrega nada muy innovador a lo que Chris Cornell ya ha hecho en el pasado, Higher Truth es un buen álbum que destaca dentro de su discografía como solista y que lo reivindica frente a quienes lo criticaron por el infame Scream.