Por Cristóbal Pinto Riquelme @ElSuburbano93
La primera vez que escuché Protistas fue por una mina que quería jotearme, así que en ese entonces no conocía a la banda, esto, que pasó en el 2012 más o menos no tiene mucha relevancia en el review que le haré al último trabajo de la no muy conocida banda chilena que acaba de lanzar el disco Nefertiti bajo el sello Quemasucabeza. Siendo dos años desde su último lanzamiento Las Cruces (2012) y cuatro desde Nortinas War (2010) bajo el alero del desaparecido Sello Cazador.
El álbum en si, cultiva un sonido fresco y nuevo que no muchas bandas en la escena actual ocupan, llámese los rasgueos limpios y distorsionados que se mezclan homogéneamente provocando un sonido armonioso, sumado a la voz de Álvaro Solar (vocalista y guitarrista) que hacen que este proyecto deslumbre con la calidad de sus composiciones artísticas.
Desde el primer segundo, y hasta que terminas de escuchar el disco, se nota la obsesión con la muerte, sentimiento y motivación (por llamarlo de una forma) impulsa las armonías dedicadas a la memoria del padre de Álvaro, el cual falleció. Por otro lado se siente la maduración musical dejando de lado los sonidos de trabajos anteriores, pero sin dejar atrás su esencia que los hace únicos y dignos merecedores del título de la banda representante del Lo-Fi chileno.
La oscuridad y melancolía de la pérdida son la premisa principal del disco con frases tan evidentes como “por favor no te vayas tan luego” (del track Eurodisney) y “no puedo entender por qué se encuentra mi padre” (del track Mi Familia) son la representación clara de lo que el disco quiere expresar, más que vender, quiere homenajear y descargar los gritos del dolor que causa la pérdida de un ser querido. Las líricas de Solar están mucho más pulidas y trabajadas que en sus trabajos anteriores y eso denota el trabajo que le ha querido entregar a su proyecto que sirve como representación de Chile en el extranjero.
El hype del disco también fue muy bien logrado con el single “En mis genes” siendo el videoclip de este, dirigido por el cineasta chileno Matías Rojas, el cual estrenó su película Raíz este mismo año, todo esto sirviendo de antesala y preparando el terreno para Nefertiti.
La oscuridad de las canciones son fruto de las experiencias personales del mismo Álvaro. Nefertiti es, sin duda, el disco mejor logrado de la banda, consolidando su sonido que prácticamente es el gran desafío de lanzar un álbum. Siendo mérito completamente de la banda haber logrado un disco tan bien pulido y conciso que expresa un concepto/sentimiento de principio a fin.
